Con la temporada regular terminada, es hora de repasar la actuación de Premier Pádel como el máximo responsable del deporte del 20x10. Este 2024 ha sido el primer año en que los jugadores han podido experimentar de primera mano la propuesta y las promesas que Premier Pádel hizo hace unos años. En cuanto a la gestión, poco hay que debatir: el pádel ha llegado a nuevos lugares, pero ¿de qué manera? El afán de los directivos por abrir el circuito a los Emiratos Árabes ha tenido tanto ventajas como inconvenientes.
Imagen del Italy Major. PadelMagazine
En un año en el que se han disputado 24 torneos, resulta inadmisible que solo seis de esos eventos se hayan celebrado en los países que han hecho grande a este deporte: España y Argentina. Para ser más específicos, enumero: Sevilla, Málaga, Madrid , Valladolid y el Master Final de Barcelona en España, y Mar del Plata en Argentina. De verdad, el país que este año ha ganado el mayor trofeo que un deportista puede obtener, el campeonato del mundo, solo puede contar con un torneo en todo el calendario, y además, una prueba de la menor categoría: un simple P2. Esto es incongruente, sobre todo para el país que más ha dado a este deporte.
En cuanto a la organización de los torneos, es cierto que la situación ha mejorado con respecto a la etapa de World Pádel Tour, o al menos eso aseguran los propios protagonistas del deporte. Sin embargo, si las cosas se hicieran como en el torneo de Kuwait P1, el pádel podría llegar mucho más rápido a sus cotas más altas. Para ser el primer año, podemos calificar la gestión con un notable. Pero, para el año que viene, los deberes para Premier Pádel son varios.
En primer lugar, tanto España como Argentina deben contar con más pruebas y con mayor peso dentro del calendario. En segundo lugar, es fundamental establecer una bola oficial para todos los torneos, en lugar de cambiar de pelota cada dos semanas, lo que afecta la calidad del juego y dificulta el desarrollo de un estilo rápido y de remates constantes. Y, por último, es esencial tener en cuenta las propuestas de los propios protagonistas del deporte. Ayer mismo, uno de los mayores referentes, Paquito Navarro, sugirió algunas ideas que no vendrían mal, como la implementación del “punto de oro”. Un cambio que, como ya se vio en World Pádel Tour, no acorta la duración de los partidos, pero sí aporta una emoción extra que atrae a muchos más aficionados.
Si tengo que responder a la pregunta “¿Está el pádel en buenas manos?”, la respuesta es sí, pero como he expuesto a lo largo de estas palabras, hay decisiones y cambios que deben tomarse no como un simple consejo, sino como una obligación para los próximos años.
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